EFE
Nueva York
La ciudad de Nueva York tiene 83 hoteles destinados a albergar a migrantes recién llegados a la ciudad mientras tramitan sus documentos y buscan trabajo, señaló hoy el alcalde Eric Adams, que dijo que además hay cinco centros de asistencia humanitaria para el mismo fin.
Los hoteles son de varias categorías, alguno de ellos incluso de cierto lujo, como el Holiday Inn del Distrito Financiero, con vistas al río Hudson, que próximamente abrirá como hotel para migrantes, dijo hoy el alcalde.
El hotel dispone de 492 habitaciones donde se alojarán familias compuestas por adultos y para mujeres solteras, ya que los hombres no acompañados suelen ser enviados fuera de los hoteles, a los centros de asistencia o albergues.
De acuerdo con el alcalde, más de 44.000 inmigrantes, en su mayoría venezolanos, han llegado a Nueva York en los últimos 10 meses, abarrotando los albergues públicos, por lo que la ciudad ha tenido que recurrir a alquilar habitaciones en hoteles para brindarles refugio, además de comidas y servicios legales, entre otra ayuda.
Hoy mismo, EFE pudo comprobar que los emigrantes acuden desde los hoteles donde se les aloja a la estación de autobuses de Port Authority, donde se les provee de ropa, calzado y bolsas de comida, generalmente provistas por ONG, aunque la operación está supervisada y controlada por funcionarios municipales.
La mayoría de los inmigrantes han llegado en autobuses enviados por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, aunque algunos lo han hecho por su cuenta.
Este flujo incesante de adultos y niños, a los que una ley obliga a darles cobijo- y que esperan lograr asilo en el país, ha causado una crisis humanitaria y económica que llevó a Adams a declarar el estado de emergencia y pedir urgente ayuda al gobierno federal y estatal.
Algunos están optando por dejar Nueva York por otros destinos, incluido Canadá, hacia donde ha aumentado el flujo en los últimos días, apoyados por la administración municipal, que facilita el viaje a todos los que quieran dejar la ciudad.
“Seguimos cumpliendo con todas nuestras obligaciones morales, sirviendo a los que llegan con dignidad y cuidado, pero seguimos necesitando urgentemente apoyo adicional de nuestros socios federales, incluida una estrategia de descompresión real para frenar esta afluencia”, reiteró hoy Adams.
El quinto Centro de Ayuda y Respuesta de Emergencia Humanitaria fue abierto temporalmente en un terminal para cruceros en el condado de Brooklyn, y ha sido motivo de quejas por parte de los inmigrantes que denunciaron no había calefacción, estaba lejos y tenía pocos baños.