Policías de Yonkers no podrán intervenir en NYC

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Policías de Yonkers no podran intervenir en NYC
Oficiales y personal del Departamento de Policía de Yonkers.

El comisionado de YPD pide con efecto inmediato que sus oficiales cumplan con abstenerse de actuar en la ciudad de Nueva York

El comisionado de policía de Yonkers, John J. Mueller, emitió una orden para cesar la actividad policial en Nueva York, en referencia a la reforma policial aprobada esta semana por el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio y el comisionado de policía de NYPD.

Mueller dijo que su acción fue necesaria debido a que el Consejo de la Ciudad de Nueva York propuso, una Ley en la Ciudad de Nueva York que requiere el encarcelamiento o multas de cualquier oficial de policía que ponga una rodilla en la espalda o el pecho de una persona durante un arresto. La ley fue firmada por el alcalde de Blasio.

El alcalde de Yonkers, Mike Spano, apoya la orden del comisionado Mueller.

“Aquí en Yonkers, nuestro Departamento de Policía trabaja en estrecha colaboración con la comunidad, y el bajo número de quejas es el resultado de eso. No usamos estrangulamientos, y no usamos más fuerza de la absolutamente necesaria, incluso cuando tratamos con personas que son extremadamente violentas o sufren angustia mental”, dijo el viernes el alcalde de Yonkers, Mike Spano.

La Ciudad de Yonkers ha prohibido durante mucho tiempo el uso de estrangulamientos por parte del Departamento de Policía, excepto en las luchas de vida o muerte, y ha participado en una variedad de prácticas para minimizar el uso de la fuerza durante los arrestos. Como resultado, las quejas de fuerza excesiva por parte de la Policía de Yonkers han caído dramáticamente en los últimos años. Solo seis de esas quejas fueron presentadas el año pasado, indica el Departamento de Policía de Yonkers, a través de un comunicado de prensa.

-Aviso-

“A pesar de nuestros mejores esfuerzos para minimizar el uso de la fuerza, sigue siendo muy posible que la rodilla de un oficial de policía termine en el pecho o la espalda de un sospechoso violento durante una pelea o arresto, especialmente durante una situación individual”, dijo Spano.

Por su parte el comisionado Mueller dijo que “no vamos a someter a nuestros oficiales a la amenaza de un año en la cárcel cada vez que tengan que lidiar con un sujeto violento o con enfermedades mentales que resista el arresto. La nueva ley de la ciudad de Nueva York va más allá de la policía efectiva. Pone en peligro la seguridad tanto de los agentes de policía como del público”.

Mueller agregó que era importante tener en cuenta que esto no era en modo alguno una reflexión sobre la policía de Nueva York.

“El Departamento de Policía de Yonkers ha tenido y seguirá teniendo el mayor respeto y admiración por los hombres y mujeres de la policía de Nueva York. El cuerpo legislativo ha colocado a la policía de Nueva York en una posición casi imposible para ofrecer estrategias de vigilancia medidas, meditadas y apropiadas para los residentes que más las necesitan”, continuó Mueller.

Nuestros hermanos y hermanas de la policía de Nueva York han contribuido con innumerables estrategias policiales innovadoras y transformadoras que han beneficiado en gran medida a los ciudadanos y la policía en todo el mundo, dijo el comisionado de la Policía de la ciudad de Yonkers.

El comisionado Mueller declaró además: “La ley de la ciudad de Nueva York obviamente no fue escrita por nadie que haya tenido que poner esposas a un individuo violento que se resistía a ser arrestado. La Policía de Yonkers no utiliza estrangulamientos ni participa en otras acciones que ponen en peligro la vida de un sujeto, pero tampoco podemos poner en peligro la vida de un oficial; y ciertamente no vamos a pedirles que se arriesguen a ir a la cárcel solo por hacer su trabajo”.

El Comisionado Mueller también señaló que la PBA de Yonkers ha expresado su profunda preocupación por la nueva ley de la ciudad de Nueva York.

Mueller dijo que la policía de Yonkers, incluso cuando se dedica a una búsqueda activa, se detendrá en la línea de la ciudad de Nueva York en el futuro en ausencia de circunstancias extremas.