Un líder en la investigación forense

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José Roberto Lagos comenzó como examinador poligráfico y ahora es un experto perito forense en Nueva York

José Roberto Lagos, un peruano especializado en la carrera de investigación forense.

Sala de Redacción/Westchester Hispano

José Roberto Lagos Albino, natural de Lima, llegó a los Estados Unidos en 1973, vivió en Florida, luego en Nueva York y California, pero volvió al estado del imperio para quedarse y establecer su empresa de servicios de investigación en el campo forense, desde la cual ayuda a los latinos.

De padre ayacuchano y madre de Cerro de Pasco, Lagos se siente feliz al contar que sus padres eran serranos y que fue criado con esas costumbres que incluyen la comida serrana y las fiestas.

“Teníamos una casa grande y un corral en donde criábamos conejos, cuyes, pollos, pavos y las fiestas siempre eran con bandas, que es mi recuerdo más preciado de la juventud”, dijo.

Su querida madre fue quien lo trajo a Nueva York buscando oportunidades, ya que su hijo recibió buena educación en escuelas privadas, además de estudiar durante sus vacaciones inglés, mecanografía, guitarra, violín, acordeón y otros cursos.

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En 1982 nace su hijo en Miami Beach. Luego viaja a California en donde estudia, en el Polygraph Institute de Los Ángeles, la compleja carrera de detector de mentiras e investigación forense de casos no criminales.

Fue así que, consigue su primer trabajo como examinador poligráfico en California, trabajando con oficiales de aduana, de la DEA y el FBI.

En 1987 decide volver a Nueva York, a pedido de su hijo, sin embargo, no le fue fácil conseguir empleo en su especialidad y tuvo que hacer de todo para mantenerse, incluyendo trabajos de seguridad. Vuelve a California en donde encuentra un empleo en una oficina estatal en su especialidad, un trabajo que era sacrificado porque le tocaba investigar en zonas muy peligrosas.

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“Es bastante riesgoso y tengo que contar que el equipo de investigadores, mayormente blancos, no pueden ingresar a ciertos sectores de Los Ángeles debido al alto tráfico de drogas. Eso me favoreció para encontrar empleo, ya que es menos peligroso ingresar como hispano”, dijo.

De vuelta a Nueva York en 1996, trabaja en Nyack en investigación bajo el programa de Motores y Vehículos Indemnización y Compensación (MVAIC), que es un fondo para ayudar a las personas que sufrieron un accidente pero que no pueden cobrar compensación. MVAIC es tramitado por los abogados de accidentes.

“Mi trabajo era ver si hay cámaras para verificar si es cierto lo que la víctima está diciendo, ver si la persona se ha caído, y si aplica para las reglas de los accidentes”, explica.

Luego forma su empresa y presta sus servicios de Perito en Evidencias Forénsicas, incluyendo poner su firma y sello con lo cual puede ser llamado a testificar en la corte, al haber sido el primero en atender el accidente.

Lagos ha recibido satisfacciones y duras experiencias. Por ejemplo, fue parte de una investigación que le asignó un empleador en Los Ángeles, sobre infidelidad conyugal que solicitó un millonario.

“A los pocos meses de entregarle los resultados el hombre mató a su esposa. Fue una experiencia difícil. Hay cosas buenas y no buenas, pero mi jefe me dijo que se trató de un servicio para el cliente y punto”, recuerda.

Uno de los clientes de Lagos es Omrani Taub, abogados de accidentes, en White Plains. “Los conocí en 1998 y comencé a realizar trabajos para ellos y varios abogados, luego que la empresa en donde trabajaba cerró al ser afectada en los ataques del 11 de septiembre.

Cuenta que en un tiempo en su vida tuvo problemas con el alcohol que ha superado y ahora es un consejero en estos casos en Westchester y un líder que ayuda a personas afectadas por este flagelo.

Publicado el 23 de Julio 2021

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