El Departamento de Educación informa que si uno o más estudiantes de la misma clase dan positivo a COVID-19, sus aulas serán cerradas

El Departamento de Educación (DOE) lanzó nuevos protocolos para manejar cualquier posible caso confirmado de coronavirus COVID-19 en las escuelas públicas de Nueva York en el inicio del período escolar 2020-2021.
Según el plan del DOE, si uno o más estudiantes de la misma clase dan positivo, sus salones de clase se cerrarán y cualquier persona que haya tenido contacto cercano con esos estudiantes deberá someterse a cuarentena durante 14 días.
Si dos o más niños en la misma escuela dan positivo del virus, pero no comparten un aula, todo el edificio cerrará durante dos semanas.
Si surgen al menos dos casos en el mismo edificio, pero las infecciones ocurrieron fuera de la escuela, el DOE también cerrará todo el edificio mientras investiga la fuente de las exposiciones.
Una vez que se completen las pruebas de esos casos, la escuela volverá a abrir, mientras que las aulas afectadas permanecerán cerradas durante dos semanas. Otros estudiantes y personal serán puestos en cuarentena según el lugar donde tuvo lugar la exposición.
Si los esfuerzos de rastreo no pueden determinar el origen de la infección, las escuelas se cerrarán automáticamente durante 14 días.
Los niños que se ven obligados a abandonar las aulas debido a una exposición pasarán al aprendizaje remoto.
“Estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para mantener a los niños saludables al tiempo que nos aseguramos de que reciban la educación que merecen”, dijo el alcalde Bill de Blasio.
“Estos rigurosos protocolos de prueba y rastreo mantendrán seguros a nuestros estudiantes y al personal al comenzar este nuevo año escolar”, explicó el alcalde neoyorquino.
El DOE dijo que alentará a todo el personal de la escuela a hacerse la prueba en los días previos al inicio programado para el 10 de septiembre próximo, y se les dará prioridad en 34 sitios de prueba en toda la ciudad.
Si surgen grupos, el DOE dijo que podría tomar medidas más drásticas en función de las circunstancias.
El Departamento de Educación también requerirá algún tipo de documentación para considerar un caso confirmado.
“Los neoyorquinos hicieron el trabajo increíblemente difícil para reducir el riesgo que representaba COVID-19, y como resultado estamos en una mejor posición que cualquier otra ciudad del país para reanudar de manera segura la educación en persona en las condiciones actuales y con claridad, con protocolos de salud consistentes”, dijo el canciller escolar Richard A. Carranza.
Se requerirá que los estudiantes y maestros que se sienten enfermos se queden en casa y se les aliente a hacerse la prueba si sus síntomas son compatibles con el coronavirus.
Los niños que se sienten mal en la escuela serán aislados y monitoreados por un miembro del personal hasta que puedan ser recogidos, dijeron las autoridades.
También se les pedirá a los empleados que muestren signos de enfermedad que abandonen sus edificios.
El plan de reapertura de la Alcaldía hará que los estudiantes alternen entre el aula y el aprendizaje remoto.
El plan enfrenta una fuerte resistencia tanto de los maestros de la ciudad como del sindicato de directores. Ambos grupos cuestionan la preparación logística y de seguridad del DOE. El alcalde de Blasio ha presionado para una reapertura combinada y ha enfatizado la necesidad de proporcionar algún alivio de programación para los padres que no pueden trabajar de forma remota.